Freud decía que dentro de los seres humanos habitaban dos fuerzas intensas que actúan sobre nuestra vida, representadas en Eros y Tánatos. La primera fuerza nos ata a la vida, nos mantienen en pie y nos conduce hacia un orden cósmico de armonía y estabilidad; pero junto a esta fuerza ordenadora cohabita el instituo de Tánatos, una fuerza oscura que nos conduce a la autodestrucción y que hace aflorar sentimientos retorcidos y suicidas. Hace unos días, nuestro presidente anunció nuevas medidas para combatir el rebrote del terrorismo en el Perú y para ello ha anunciado la imposición de la pena de muerte para los involucrados en estos caos.
Ante este nuevo anuncio, que se suma al pedido de la pena capital para los violadores, cabe la pregunta ¿es una nueva cortina de humo por parte del gobierno para olvidar el balance de los primeros 100 días de gobierno o acaso es que nuestro presidente alberga impulsos tanáticos, que ante cualquier problema social solo piensa como solución la pena de muerte para los que delinquen?
Sin embargo, eso no es lo peor. Lo más triste es ver como los periodistas "borregos", como por arte de programación, empiezan a llenar sus columnas y titulares del nuevo anuncio presidencial, contribuyendo a colocar en la agenda nacional temas que no van a resolver los grandes problemas del país y desviando la atención de la opinión pública. Debería haber un poco más de respeto por parte de los periodistas hacia la ciudadanía en general y evitar estas distracciones que ningún beneficio generan al país.