SOBRE LA RUTINA DEL ESCRITOR
En la página cultural del diario La República, se recoge la confesión del ganador del Premio Planeta 2007, Juan José Millás, sobre su silencio literario o el breve paréntesis que ha tomado para poder cumplir con la gira de promoción del libro ganador, El mundo. La nota dice lo siguiente:
México. EFE. El escritor y periodista español Juan José Millás, premio Planeta 2007, dijo ayer que vive un "paréntesis literario" obligado por la estela del galardón que recibió en octubre pasado por su novela El mundo.
"Ha introducido ese paréntesis que introducen todas las novelas cuando las publicas, pero en este premio hay una cuestión de grado y es más largo y más intenso", aseguró el escritor a EFE.
El parón es una etapa "enriquecedora" y "muy de cargar pilas", porque le permite viajar y tomar notas para "una especie de diario" de las que puede surgir un nuevo trabajo.
VOLVERÁ A LA RUTINA
"Cuando se escribe una novela, igual estás dos años encerrado, al terminarla vuelves de nuevo a la realidad (...), entre una y otra conviene permanecer un tiempo a la intemperie", remató el autor.
Millás (Valencia, 1946) presentará ahora el libro en Bogotá, Lima y Buenos Aires, y estará en mayo en la Feria del Libro de Madrid.
"Volveré a mis rutinas en el verano", afirmó el escritor, que sacia ahora su apetito por la escritura con una mayor dedicación al periodismo.
El premio, dotado con 601,000 euros, no ha cambiado nada "fundamental" en su vida, refirió Millás. "Quizás si me lo hubieran dado más joven, pero a estas alturas...", se explayó.
El mundo, que recrea de forma novelada su preadolescencia, no es su obra con mayor contenido autobiográfico, apuntó, para señalar a anteriores trabajos como La soledad era esto, premio Nadal 1990.
El mundo, que recrea de forma novelada su preadolescencia, no es su obra con mayor contenido autobiográfico, apuntó, para señalar a anteriores trabajos como La soledad era esto, premio Nadal 1990.
"La verdad se cuenta mejor a través de la mentira", dijo el novelista.
"En el colegio me decían que los enemigos del ser humano eran el demonio, el mundo y la carne, y siempre me dio más miedo el mundo", reflexionó sobre el título de la obra que le valió el galardón. "Es una palabra cargada de amenaza y misterio", añadió.
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