29 May 2008

LA PARTIDA ALEJANDRO ROMUALDO (HOMENAJE EN LA CASONA DE SAN MARCOS, HOY JUEVES, 3 PM)


EL ADIOS DE UN POETA SOLITARIO

Me contaban algunas persona que lo conocían que a Alejandro Romualdo le molestaba mucho que solo se le recordara por el Canto coral a Tupac Amaru. Es más, muchas veces se arrepentía de haberlo escrito, dado que este bendito poema había opacado la totalidad de su poesía. El poeta ha muerto y nos ha dejado una obra poética que pocos conocen. Los dejo con un poema:

EL CUERPO QUE TÚ ILUMINAS

Porque eres como el sol de los ciegos, Poesía,
profunda y terrible luz que adoro diariamente.
Mis ojos se queman como los ojos de las estatuas
mi corazón padece como una vaso de vino un armario.

Tú eres un puente de agonía, un mar animado
de agua viva y palpitante. Tú te alzas y brillas:
yo giro alrededor de ti; alta y pura te miro
como los perros a la luna, como un semáforo para morir.

¡Oh Poesía incesante, mi buitre cotidiano,
me tocó servirte en el reparto de sufrimientos:
como un niño exploraba las tierras pálidas del sol.

¡Oh Poderosa! Yo soy para ti uno de los miembros
de esta numerosa familia sideral
compuesta de padres e hijos milenarios.
Yo soy para ti la noche: Tú me enciendes,
ardo en el vientre universal,
rabio con las olas y las nubes,
escribo al girasol que me ama diariamente deslumbrado.

Yo te devuelvo, amor mío, como un espejo desierto
en cuyas entrañas están las cenizas de donde Tú renaces.
Yo te devuelvo amor, mi vientre se renueva sin cesar.
Tú te ocultas y muerdes, entonces, como una ola gloriosa, llena de dulzura y vigor.

¡Oh Poesía, mi rayo divino y cruel,
clava tu pico, devora el fuego que me abate, apaga esta zarza inmortal

!He aquí mi cuerpo, roído por las estrellas,
pálido y silencioso como un dios que ha cesado
y que Tú arrastras, borrándolo, como el mar o la muerte.

(De El cuerpo que tú iluminas)