11 November 2008

FERNANDO AMPUERO LO DICE TODO


SOBRE LOS "PETROAUDIOS" Y LA SITUACIÓN EN EL COMERCIO

Este fin de semana, en una programa dominical de reportajes periodísticos se dio a conocer la noticia sobre el escándalo que provocó en El Comercio la entrega de los "petroaudios" a algunos medios de prensa. Dentro de esta vorágine de corrupción, algunos periodistas honestos estuvieron implicados en este proceso y no se pudo obtener declaración alguna sobre su versión. Me refiero a Fernando Ampuero y Pablo O´Brien. Este domingo, en el diario La República, aparece una entrevista de Ángel Paez al escritor Fernando Ampuero sobre el escándalo de los "petroaudios" y su reacción en El Comercio:

–¿Por qué los "petroaudios" salieron primero en ‘Cuarto Poder’ si ustedes los tenían mucho antes?
–Porque la nueva dirección del diario El Comercio impidió la publicación, alegando que la difusión afectaría la gobernabilidad. Yo respondí que nosotros los periodistas somos personas que buscamos la verdad, nosotros no afectamos la gobernabilidad, los que afectan la gobernabilidad son los corruptos. Y la prueba es que el gobierno ha salido fortalecido y hasta el mismo presidente García ha dicho que en este caso el "chuponeo" ha sido beneficioso porque ha puesto en evidencia a los corruptos.

–Pero esa es una forma de justificar un acto ilícito. El ‘chuponeo’ es castigado por la ley y la ley no dice que el ‘chuponeo’ es bueno cuando expone la corrupción.
–Hay un ‘chuponeo’ ilegal que obra en beneficio del ciudadano y de la salud moral pública, y queda a criterio de los periodistas si publican o no la información obtenida mediante ese método. Durante una investigación uno debe buscar tanto en los altos salones de la política como en los bajos fondos. Y uno encuentra de todo. Ese es nuestro caso.

–Ricardo Uceda afirma que difundir audios obtenidos del ‘chuponeo’ no es periodismo de investigación.
–Si se refiere a limitarse a propalar un audio, sí. Pero en nuestro caso mandamos a hacer peritajes a los audios, verificamos todo lo que se tenía que verificar, hicimos una investigación que nos dio un sólido respaldo. Nuestro trabajo no se reducía a difundir grabaciones de ‘chuponeos’.

–Si bien el objetivo de los que financiaron los ‘petroaudios’ era exponer la corrupción, esa finalidad no justifica el espionaje telefónico que es una forma de crimen organizado.
–No lo justifica, pero sí justifica mi conducta periodística, porque estoy frente a un acto de corrupción. Esos señores lo que estaban haciendo no era tratar de tumbarse un gabinete o generar un problema político. Nuestra hipótesis es que se trataba de industriales peruanos avasallados por corruptos encaramados en el gobierno. Esa es la verdad de la milanesa.

–¿Está bien cometer un delito para revelar otro delito?
–Pero el periodista no es el que comete el delito. La obligación del periodista es difundir información de interés público. En este caso, además, los audios no se referían a asuntos íntimos o secretos de alcoba o temas de ese estilo. Estamos hablando de asuntos públicos. No hay una invasión de la privacidad. Había negociados y maniobras ocultas.

–¿Quién es más corrupto, el que está envuelto en los ‘petroaudios’ o el que graba ilegalmente?
–Creo que la grabación ilegal es un delito condenable, pero en este asunto hay prioridades y lo más importante es la corrupción, denunciar la corrupción y no denunciar al que hace la interceptación telefónica. En este caso, el periodista de investigación Pablo O’Brien hizo contacto con gente que le entregaba sobres cerrados, gente que no se sabe quiénes son, y que se manejaba con seudónimos, y nos entregaba el material porque sabía qué estábamos investigando.

Para continuar con la entrevista, aquí.