18 February 2008

ALONSO CUETO Y LAS IDENTIDADES NACIONALES


UNA INVITACIÓN AL DEBATE

El artículo que Alonso Cueto publica el día de hoy en su columna de Perú 21 es una invitación a un debate más serio sobre el carácter de nuestra literatura latinoamericana y las identidades que se pueden "representar" a través de ella. Lo que afirma Alonso Cueto acerca del hecho de que ninguna literatura se puede arrogar el derecho de ser la "representativa" de una identidad nacional es totalemnte cierto, pero para muchos escritores "regionalistas" esto sonará como una verdadera "herejía", dado el carácter "reaccionario", como lo "llamarían" los escritores por la identidad nacional, a este tipo de aseveraciones. Sin embargo, la mesa está servida y ya dependerá de los argumentos de cada interlocutor para poder sustentar su propuesta. Por lo pronto, los dejo con las afirmaciones de Alonso:

El tema de las literaturas nacionales, que la ideología romántica consagró, ha tenido muchos cultores en la literatura latinoamericana. Ricardo Rojas, por ejemplo, dedicó buena parte su obra a indagar acerca de la identidad argentina, y llegó a la conclusión de que el poema Martín Fierro expresaba "la piedra fundamental dentro de la identidad argentina". Su monumental Historia de la literatura argentina llevaba además como subtítulo 'Ensayo filosófico sobre la cultura en La Plata'. La idea de la literatura como expresión de alguna esencia nacional obsesionaba a Rojas, quien escribió a lo largo de la primera mitad del siglo. En esa misma época, en otras zonas del continente, el mexicano José Vasconcelos impuso el lema universitario 'Por mi raza hablará el espíritu' y se interesó en definir lo mestizo como el "concepto de mexicanidad". Antes, con otros argumentos, Rodó había intentado definir la latinidad en su famoso Ariel.

En contraposición a ellos, a comienzos de 1950, Jorge Luis Borges dictó una conferencia que, luego, iba a aparecer en su volumen Discusión. En El escritor argentino y la tradición, Borges cuestiona la idea de la identidad como "color local" y llega, entre otras, a la conclusión de que un poema de Enrique Banchs puede expresar mejor la "identidad argentina" que la poesía gauchesca. Borges concluye que es poco "nacionalista" querer circunscribir la literatura argentina a los "temas nacionales" y afirma que "no podemos concretarnos a lo argentino para ser argentinos".

Hoy, el tema de las literaturas nacionales sigue vigente. De algunos escritores se dice, por ejemplo, que son más 'peruanos' que otros y, en ocasiones, se asocia a esa marca un juicio de valor. Así, un escritor sería mejor si representa al Perú o expresa una identidad nacional. En un país multicultural y en proceso de fusión como el nuestro, donde es inútil pensar en una sola 'identidad', hacer esta relación carece de sentido. Y aunque esa identidad pudiera señalarse, la literatura no puede ser valorada por su relación con ella. Hoy, en América Latina, Jorge Volpi ambienta sus libros en la Segunda Guerra Mundial, y Bolaño los suyos en México. El colombiano Enrique Serrano escribe sobre la vida en la antigua Roma. ¿Expresan sus libros de algún modo la identidad de sus países? Saberlo no afectará mi placer de lector.