13 December 2006

LA MUERTE DE UN TIRANO

Mientras en Chile, miles de ciudadanos celebran la muerte de este macabro dictador, otros miles, con una estupidez sorprendente, lloran su muerte. La verdad, ni celebración ni llanto merece esta muerte. ¿Se puede celebrar la partida de un nefasto dictador culpable de la muerte de 3 mil personas sin haber pagado sus crímenes a la justicia? Más aún, ¿se puede llorar la muerte de alguien que fue culpable de la tortura y desaparicioón de decenas de miles de chilenos durante una de las dictaduras más sangrientas de Sudamérica?

Ante este tipo de acontecimientos lo único que queda es rendir homenaje y respeto a la memoria de los miles de chilenos que sufrieron los abusos y excesos de este tirano.