El día de ayer, en la edición de El Dominical, y hoy día en Perú 21, Ezio Neyra y Alonso Cueto, respectivamente, hacen una reseña de lo que fue la Feria del Libro de Trujillo. Ambos coinciden en señalar que el evento fue todo un éxito, gracias a su organizadora, Adriana Doig (Ver foto), y a la respuesta del público trujillano, ávido por conocer las nuevas propuestas de la literatura peruana.
Eventos como la Feria del Libro sirven de ejemplo para descentralizar la literatura y, sobre todo, para que en otras provincias se animen a organizar este tipo de eventos para promover no solo a los autores limeños, sino también a los provincianos. Una versión de esta feria se debería repetir en provincias como Chiclayo, Arequipa, Cusco y Loreto, por citar algunas, para de esta manera reactivar el ambiente cultural peruano y dar impulso a las nuevas figuras de la literatura provinciana.