CHIQUITA Y EL MUNDO FREAK

ENTREVISTA A ANTONIO ORLANDO RODRÍGUEZ

En la novela del ultimo ganador del Premio Alfaguara de Novela, Antonio Orlando Rodríguez, se recrea la vida de un personaje legendario de inicios del siglo XX: Espiridiona Cenda, una mujercita de apenas 26 pulgadas de estatura. El día de hoy, en la sección Luces de El Comercio, Enrique Planas entrevista al autor de la novela Chiquita. En las misma, el autor se refiere al mundo "freak" del que vivió rodeada la protagonista de su novela y hace referencia a una película de culto para los fanáticos de lo bizarro, Freaks, de Tod Browning. Los dejo con algunas preguntas:

Supongo que investigar en "Chiquita" lo arrastró a la cultura de lo 'freak'...

Como muchas personas, había visto la película "Freaks" (1932), de Tod Browning. Es una de mis películas de culto. Pero nunca hubo algo más allá de la fascinación que experimentamos todos al ver esa película, o cuando apreciamos las fotografías de Diane Arbus. Pero no más allá de eso. El mundo de los liliputienses es un universo inagotable, que mientras más profundizas, más aristas encuentras. Son muchos mundos coexistiendo, lo 'freak', claro, pero también la guerra, el terrorismo, el anarquismo, la 'belle epoque', los descubrimientos científicos de fines del siglo XIX. Era un mundo bastante complejo para poner en escena en una novela.

¿Una de las razones de la fascinación por "Chiquita" es nuestro miedo a ser anormales?

Creo que para nosotros es más fácil ver lo 'freak' en el otro, sobre todo si es obvio, si se evidencia en lo físico. Pero lo que nos cuesta mucho trabajo es reconocer el 'freak' que hay dentro de nosotros, que lo tenemos oculto y pisoteado. Creo que esta es una novela de gente diferente. 'Chiquita' es diferente porque es pequeña, y toda esa comparsa que se mueve a su alrededor lo es por sus peculiaridades: su criada es diferente porque es negra, su primo porque es homosexual. Hay mucha gente diferente en la novela. Es una celebración de la diferencia.

¿Cuánto cree que queda del mundo del teatro de variedades?

Pienso que poco. Me resulta fascinante encontrar, de pronto, un circo ambulante en Florencia, a la antigua usanza. Ver esa coexistencia de acróbatas, magos, bailarines y cantantes de ópera bajo la misma carpa humilde. Pero creo que es un muestrario del mundo en vías de extinción.

Hay una lúcida mirada del proceso político de la época, reflejado en esa Orden de los Pequeños Artífices de la Nueva Arcadia, grupo al que pertenece la pequeña actriz. ¿Cuánto de trasfondo político encontramos en la novela?

Hay mucho. Digamos que soy alguien a quien la mala política y el populismo le producen alergia. Hay una burla a todo el mundo de la política. Y en mi caso esa secta es un guiño para esos gobernantes. Decirles que si no saben gobernar, para qué insisten. Por qué no les damos una oportunidad a los liliputienses para gobernar, a lo mejor ellos lo hacen mejor.